Como siempre, el año nuevo llega cargado de buenos propósitos. Uno de los más habituales es hacer deporte. En este artículo hablamos de algunos efectos positivos no tan conocidos del ejercicio en el organismo que te pueden interesar.
La actividad física tiene innumerables beneficios para nuestra salud, como pueden ser la disminución de la presión arterial, la pérdida de peso, la mejora de la composición corporal (% de grasa) y la disminución del riesgo de enfermedad cardiovascular. Sin embargo, continuamente se van descubriendo nuevos beneficios de la práctica regular y adecuada de ejercicio en áreas que, en principio, no parecían estar relacionadas con él. Vamos a ver algunas de ellas:
1. El ejercicio regular puede reducir el riesgo de enfermedad de Alzheimer
Independientemente de la edad, la práctica diaria de alguna actividad física (no sólo el deporte, sino cualquier actividad cotidiana que requiera movimiento, por ejemplo las tareas de la casa) puede conllevar un menor riesgo de padecer enfermedad de Alzheimer, según esta guía publicada por la Asociación Americana de Neurología. Este efecto sería también aplicable a personas mayores de 80 años.
Asimismo, la misma guía lo recomienda para mejorar la memoria en deterioro cognitivo leve (que desemboca en demencia en muchos casos).
2. La actividad física produce cambios en la microbiota intestinal
Según este estudio, el ejercicio de resistencia practicado 3 veces a la semana induce cambios en la composición y la función de la microbiota intestinal. Ya hemos hablado en otros posts de la importancia de la microbiota en la salud de nuestro organismo.
También hay evidencia del efecto beneficioso del ejercicio aeróbico sobre el estreñimiento, aunque sea un simple paseo diario de unos 10-15 minutos.
3. Mejora los síntomas y retrasa la progresión de la enfermedad de Parkinson
Existen estudios que relacionan la práctica de ejercicio de alta intensidad con una mejora en los síntomas psicomotores y con un retraso en la progresión de la enfermedad en pacientes con Parkinson temprano.
4. Es un importante complemento para el tratamiento de la depresión
La actividad física tiene un efecto positivo sobre el humor y la energía y reduce el estrés, mediante cambios bioquímicos en el cerebro similares a los producidos por la medicación, como el incremento de los niveles de serotonina.
No tiene efectos adversos y, además, si lo realizas al aire libre tendrás el beneficio añadido de la exposición a la luz solar, que también es parte importante del tratamiento holístico de la depresión.
5. Podría mejorar el aprendizaje al consolidar la memoria asociativa después de estudiar
Según este artículo la práctica de ejercicio aeróbico moderado a las 4 horas de estudiar mejora la retención y la memoria asociativa, aunque aún son necesarios más estudios para determinar la posible aplicación de este hallazgo en el campo educativo.
6. Mejora el aspecto de la piel
El último de los beneficios del ejercicio que tratamos hoy: al incrementar el flujo sanguíneo, el ejercicio aumenta la cantidad de oxígeno y nutrientes que llegan a nuestras células, incluyendo las de la piel, lo cual se traduce en un aspecto más radiante y saludable. También tiene efectos positivos en patologías como el acné y la dermatitis, al modular las hormonas del estrés, que regulan también las glándulas sebáceas.
Sin más, desde el blog te deseamos un año lleno de salud y felicidad.
Autor/es
FarmacéuticaCentro de Información del Medicamento del COF Sevilla