¿Por qué me tengo que vacunar de la gripe? ¿Otra vez COVID? Ya estamos cansados de tantas vacunas… ¿Y mi mascota qué tiene que ver? ¿Por qué es importante vacunarlos a ellos también? Si quieres razones que te ayuden a tomar la decisión de vacunarte y vacunar a tus seres queridos, entre los que se encuentra tu mascota, sigue leyendo este post que hemos elaborado en el Departamento Técnico en colaboración con el grupo de Adjúntate Veterinaria.

Estamos entrando en la temporada otoño-invierno y como cada temporada, si vives en Andalucía y eres paciente crónico (diabético, tienes problemas con la tensión, tienes enfermedad respiratoria o de riñones, celiaco o trasplantado entre otras condiciones) o convives con alguno de ellos, estás embarazada, eres mayor de 65 años (60 en el caso de la COVID-19), profesional sanitario o perteneces a los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, debes pedir cita para vacunarte de la gripe y la COVID-19.

Es cierto que después de la pandemia estamos cansados de tantas vacunas (le llamamos fatiga pandémica) y nos puede dar un poco más de pereza, pero este año es especialmente importante que no olvides vacunarte y que lo hagas en cuanto puedas, y te vamos a explicar por qué.

Hemos estado dos años con fuertes medidas de seguridad, sobre todo mascarillas y distanciamiento social que ha provocado un menor trasiego de los virus respiratorios, por eso hemos tenido muchos menos casos de infecciones respiratorias. Hemos cortado la transmisión. Pero ahora volvemos a la vida pre-pandemia, y ha pasado tanto tiempo que hay pacientes que se han vuelto de nuevo susceptibles, es decir, su sistema inmune ha “olvidado” como son esos microorganismos; por tanto, cuando vuelvan a estar en contacto con ellos, podrían infectarse y enfermar como si fuera la primera vez. Esto es especialmente preocupante en las personas mayores, que ya tienen el sistema inmune debilitado por su propia edad, y en los pacientes de riesgo, donde la COVID-19, gripe o neumonía pueden suponer complicaciones, ingreso hospitalario e incluso muerte.

Si hablamos de gripe, existe incertidumbre sobre la intensidad e impacto que pudiera tener este año. En el hemisferio sur, concretamente en Australia, la epidemia de gripe se ha adelantado varias semanas sobre la fecha habitual y con una incidencia mayor que la media de años previos. Por todo esto, este año existe una recomendación fuerte para la vacunación antigripal en toda la población diana.

Con respecto a la COVID-19, la inmunidad disminuye con el tiempo, sobre todo frente a las nuevas variantes que van surgiendo, por lo que es crucial que las personas con mayor riesgo reciban una dosis de recuerdo para reforzarla. Además, las vacunas disponibles de COVID-19 incluyen la variante circulante predominante en la actualidad en España (Ómicron BA.5). La coinfección de gripe y COVID-19 presenta mayor riesgo de muerte que ambas infecciones por separado.

Por todo esto, sobre todo si perteneces a los grupos de riesgo o tienes más de 60 años, vacúnate.

Y ahora, hablemos de tu perro: la rabia es una enfermedad prevenible mediante vacunación que afecta a más de 150 países y territorios. El perro es la principal fuente de muertes humanas por rabia, contribuyendo hasta el 99% de todas las transmisiones de la rabia a los humanos. La probabilidad de morir si un humano contrae la rabia es cercana al 100%. Es cierto que España se considera un país libre de rabia, pero hay cada vez más personas que viajan a sus países de origen en vacaciones con sus mascotas, y en esos países sí que hay casos de rabia. En esas vacaciones pueden producirse contagios a sus mascotas que luego regresarán a España. Es posible eliminar esta enfermedad vacunando a los perros y evitando sus mordeduras, pero es importante que estén vacunados.

Aunque la vacuna de la rabia en Andalucía es obligatoria en perros, gatos y hurones, en general en España tenemos coberturas vacunales bajas, incluso habiendo comunidades autónomas donde ni siquiera existe esa obligatoriedad. Por tanto, es importante que compruebes que tu mascota está correctamente vacunada.

La primera vacunación se debe efectuar a partir de los tres meses de edad de los animales. Deberán ser revacunados a los treinta días de la primo-vacunación. Además, anualmente, deberá hacerse una revacunación. Esta vacunación deberá realizarse bajo prescripción veterinaria y bajo la supervisión de un veterinario autorizado. Debe hacerse constar en la cartilla sanitaria, indicando fecha del tratamiento, fabricante, nombre del producto y lote.

 

Bibliografía

Autor/es

María García Martínez

Farmacéutica comunitaria. Miembro del grupo Adjúntate Veterinaria del RICOFSE.

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Farmacéutica. Desarrollo de Proyectos Profesionales y Relaciones Institucionales del COF Sevilla.