Por todos es conocida la existencia de diferentes afecciones bucales como herpes, llagas, boqueras, hongos, etc. Pero, ¿realmente sabemos diferenciarlas? ¿Sabemos cuándo ir al médico y cuándo a la oficina de farmacia? En este post vamos a resumir brevemente las principales diferencias entre unas y otras lesiones, qué criterios debemos seguir para ir al médico, así como ofrecer consejos preventivos de higiene diaria para una boca sana.
Diferentes lesiones, diferentes características:
Criterios de derivación al médico
- Si las lesiones que aparecen llevan 10 días sin mejoría aparente o no responden al tratamiento.
- Si además de estas lesiones la persona cursa con fiebre alta y/o ampollas dentro de la boca.
- Si las lesiones no están localizadas y se encuentran diseminadas por toda la cavidad oral.
- Si en 1 año ha sufrido 4 o más veces alguna de estas lesiones de forma recurrente.
- Si aparecen costras amarillentas en las heridas formadas en los labios u otras coloraciones en el interior de la mucosa.
- Si el paciente presenta inmunosupresión o está recibiendo algún tratamiento oncológico o inmunosupresor.
- Sticks labiales preventivos y protectores.
- Colutorios antisépticos
- Geles bioadhesivos regeneradores
- Apósitos hidrocoloidales
- Bálsamos reparadores
- Suplementos minerales o multivitamínicos
- Complementos alimenticios.
- Regeneradores: Óxido de zinc, vitamina B5, vitamina B3, vitamina E.
- Restauradores: Pre y pro bióticos
- Antisépticos/antimicrobianos: Clorhexidina, triclosan, propoleo, aceite del árbol del té.
- Hidratantes, protectores: Ácido hialurónico, glicerina, mantecas, filtros solares.
- Inmunoestimulantes: Equinácea, vitamina C, zinc.
- Otros: Lisina, formadores de película.
Consejos. Rutina para una boca sana y protegida
Autor/es
Farmacéutico comunitario. Grupo Adjúntate Dermofarmacia del COF Sevilla.